Reseña: Ocho
Título: Ocho.
Editorial: Montena.
Género: Juvenil, romance, contemporáneo.
Precio: 14.95€ (Físico) / 7.99 € (E-Book).
Fecha de publicación: 12/2017.
Páginas: 240.Primera/tercera persona: Primera.
Sinopsis oficial: 1. El tiempo máximo del que dispongo para hacer feliz a una persona son ocho semanas.
2. Si no lo consigo y considero que podría llegar a hacerlo, tengo un tiempo extra de ocho días.
3.Transcurrido el tiempo desaparezco por completo de la vida del paciente, su felicidad en ningún momento puede depender de mí.
Mía tiene un trabajo inusual: se dedica a hacer felices a las personas sin que ellas sepan que lo hace por trabajo. Precisamente por eso la contratan los padres de Max, un chico que ha intentado suicidarse. Cuando los caminos de ambos se crucen, saltarán chispas: él no quiere verla ni en pintura, ella tiene que hacer todo lo posible por devolverle la felicidad.
3.Transcurrido el tiempo desaparezco por completo de la vida del paciente, su felicidad en ningún momento puede depender de mí.
Mía tiene un trabajo inusual: se dedica a hacer felices a las personas sin que ellas sepan que lo hace por trabajo. Precisamente por eso la contratan los padres de Max, un chico que ha intentado suicidarse. Cuando los caminos de ambos se crucen, saltarán chispas: él no quiere verla ni en pintura, ella tiene que hacer todo lo posible por devolverle la felicidad.
"Ocho" es la nueva novela de Rebeca Stones, una youtuber y escritora que debutó en este último oficio con "Timantti, descubre la verdad". Este libro es el segundo que publica, y la historia que encierran sus páginas es totalmente distinta a la de Timantti.
Mía es una chica de dieciocho años que no tiene estudios más allá del bachillerato, pero que se le da realmente bien intimar con la gente. Puede conseguir que le cuenten sus secretos, y sacarles una sonrisa con una facilidad increíble. Después de ser muchas veces elogiada y percatarse de que tiene una gran virtud, ha decidido dedicarse a hacer feliz a las personas profesionalmente.
"Pero sigo esperando, y la espera me carga con su respectiva esperanza. La esperanza de encontrar a alguien puro, a alguien que solo quiera el bien y dispuesto a dar bondad para recibir también bondad".
Sin embargo, para hacer que su trabajo sea más efectivo, Mía crea ocho normas. Una de ellas dice que el tiempo máximo del que dispone para hacer feliz a una persona son ocho semanas, y en el caso de que sea preciso, cuenta con ocho días extra sin coste alguno para los clientes. Además, una vez haya pasado el tiempo, Mía debe desaparecer de la vida del paciente para siempre.
Los Jones, una familia adinerada, deciden llamarla con la esperanza de que les ayude con su hijo Max, un muchacho que había intentado suicidarse y no quiere saber nada de sus padres. Al principio, ellos dudan de los poderes de Mía, en especial la madre, pero ya que lo han intentado todo y no les queda otra deciden darle una oportunidad a ella.
"Cuando infravaloras a una persona, jamás sabrás de lo que es capaz hasta que no te lo demuestre".
Aunque se los ofrecen, Mía no quiere detalles acerca de cómo comenzó la depresión de Max, pues jamás deja que las personas que la contraten le cuenten el caso del paciente; según dice, la mejor forma de intimar con una persona es adoptando su punto de vista. Además, Max no sabrá en ningún momento que ella ha sido contratada, por lo que esta deberá actuar sin descubrir su verdadera identidad.
"Y por eso mismo, por admitir ser una sumisa ante mi corazón, he sufrido tanto a lo largo de mi vida. Porque jamás fui capaz de dejar la bondad y la misericordia a un lado, porque me he pasado día tras día admitiendo que la única fuerza capaz de mover el mundo es el amor, cuando a veces el amor el lugar de mover el mundo solo lo paraliza y hace que te engulla un agujero negro, convirtiéndote en algo temporal, en algo inexistente".
Cuando Mía lo conoce, él es totalmente distinto a como se esperaba. Frío, egocéntrico, egoísta... No se lo pondrá nada fácil a la chica, y tendrán varios conflictos que probarán su paciencia y ganas de realizar su trabajo con éxito. Sin embargo, aunque Mía se da cuenta de que su caso le va a resultar más complicado que otros con los que se ha visto, esa es una de las razones que hacen que no se quiera rendir. Por muchos obstáculos que se interpongan en su camino, Mía conseguirá llegar hasta el helado corazón de Max y que este vuelva a ser feliz.
El ritmo de la narración es rápido y sencillo, perfecto para la historia. Además, está en tiempo presente y contada por Mía en todo momento. Respecto a los personajes, el de Lucas, el mejor amigo de la protagonista, es en mi opinión uno de los mejores. Me habría gustado que hubiese hecho más apariciones, que se le hubiesen dedicado más páginas; creo que es un personaje secundario que podría haber sido pulido más.
"Y si quieres llorar, llora. Si quieres escapar de todo, escapa. Vayas donde vayas tu esencia nunca va a desaparecer. Aunque a veces no te lo parezca, siempre va a estar ahí, escondida dentro de ti. [...] Aunque a veces te destruyan, tú vas a ser la única que pueda reconstruirse".
El libro contiene unas reflexiones muy profundas, pero en alguna que otra ocasión eran demasiado extensas y parecían estar metidas con un calzador; es una historia de amor muy bonita, pero en mi opinión el amor que surge entre Mía y Max es algo repentino. También me gustó mucho que la autora le diera tanta importancia a las emociones, y la idea que tuvo al crear un trabajo tan peculiar para Mía (con sus ocho normas) es genial. Sin embargo, el transcurso de la historia me pareció algo predecible y, salvo algún momento, no me llevé demasiadas sorpresas. En mi opinión, creo que la trama podría haber dado más de sí; he pasado un buen rato leyendo la novela y como consecuencia se me hizo bastante corto.
Aunque se los ofrecen, Mía no quiere detalles acerca de cómo comenzó la depresión de Max, pues jamás deja que las personas que la contraten le cuenten el caso del paciente; según dice, la mejor forma de intimar con una persona es adoptando su punto de vista. Además, Max no sabrá en ningún momento que ella ha sido contratada, por lo que esta deberá actuar sin descubrir su verdadera identidad.
"Y por eso mismo, por admitir ser una sumisa ante mi corazón, he sufrido tanto a lo largo de mi vida. Porque jamás fui capaz de dejar la bondad y la misericordia a un lado, porque me he pasado día tras día admitiendo que la única fuerza capaz de mover el mundo es el amor, cuando a veces el amor el lugar de mover el mundo solo lo paraliza y hace que te engulla un agujero negro, convirtiéndote en algo temporal, en algo inexistente".
Cuando Mía lo conoce, él es totalmente distinto a como se esperaba. Frío, egocéntrico, egoísta... No se lo pondrá nada fácil a la chica, y tendrán varios conflictos que probarán su paciencia y ganas de realizar su trabajo con éxito. Sin embargo, aunque Mía se da cuenta de que su caso le va a resultar más complicado que otros con los que se ha visto, esa es una de las razones que hacen que no se quiera rendir. Por muchos obstáculos que se interpongan en su camino, Mía conseguirá llegar hasta el helado corazón de Max y que este vuelva a ser feliz.
El ritmo de la narración es rápido y sencillo, perfecto para la historia. Además, está en tiempo presente y contada por Mía en todo momento. Respecto a los personajes, el de Lucas, el mejor amigo de la protagonista, es en mi opinión uno de los mejores. Me habría gustado que hubiese hecho más apariciones, que se le hubiesen dedicado más páginas; creo que es un personaje secundario que podría haber sido pulido más.
"Y si quieres llorar, llora. Si quieres escapar de todo, escapa. Vayas donde vayas tu esencia nunca va a desaparecer. Aunque a veces no te lo parezca, siempre va a estar ahí, escondida dentro de ti. [...] Aunque a veces te destruyan, tú vas a ser la única que pueda reconstruirse".
El libro contiene unas reflexiones muy profundas, pero en alguna que otra ocasión eran demasiado extensas y parecían estar metidas con un calzador; es una historia de amor muy bonita, pero en mi opinión el amor que surge entre Mía y Max es algo repentino. También me gustó mucho que la autora le diera tanta importancia a las emociones, y la idea que tuvo al crear un trabajo tan peculiar para Mía (con sus ocho normas) es genial. Sin embargo, el transcurso de la historia me pareció algo predecible y, salvo algún momento, no me llevé demasiadas sorpresas. En mi opinión, creo que la trama podría haber dado más de sí; he pasado un buen rato leyendo la novela y como consecuencia se me hizo bastante corto.
Conclusión: Es un libro que engancha, casi tanto o más que "Timantti, descubre la verdad", aunque este me gustó mucho más que la nueva publicación de Rebeca Stones. "Ocho" es una novela contemporánea y romántica en la que se tratan temas como la depresión, la traición y la venganza, pero también te enseña una lección sobre la generosidad, la sinceridad y lo importante que es amarse a uno mismo, por encima de todo.
Puntuación: 3/5
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